En muchas empresas se vienen escuchando en los Directorios que, tanto CEOs, CIOs, gurúes en tecnología y vendedores, están hablando de Cloud, y haciéndose las mismas preguntas:
«¿Vamos a subir al Cloud? ¿Cuándo?»
«¿Cuál va a ser su estrategia en Cloud?»
Y afirmar categóricamente:
“Cloud es el futuro, no se pueden quedar afuera.”
¿Pero realmente es así? ¿Es el Futuro? ¿Es un cambio total de paradigma? ¿Es Cloud o ninguna otra alternativa?
Nunca nada es tan categórico.
El mundo de los sistemas de información es cada vez más complejo, y no hay empresas que puedan prescindir de ellos en alguno de sus sabores.
Es habitual que quienes estamos dentro de este ámbito tengamos un sesgo importante (deformación profesional lo llaman algunos), y pensemos:
sistemas de información = grandes empresas / ERP / Warehouse
Pero hoy en día, los sistemas de información incluyen mucho más y con más alcance. No son solamente el sistema de finanzas de una empresa, el sistema de toma de pedidos web o el manejo de un depósito de mercadería, por citar algunos ejemplos.
También son el sistema de e-mail que utilizamos (piense en el impacto que tiene para su empresa el no contar con esa utilidad por unas horas), un repositorio de documentos compartidos, y una cantidad de soluciones informáticas que hoy damos por sentadas y que son indispensables para el correcto funcionamiento de las empresas.
Hoy nos encontramos con varios ejemplos donde nuestras empresas YA se encuentran operando en Cloud: por ejemplo, un porcentaje cada vez más grande de empresas que utiliza el e-mail corporativo Cloud, algo similar sucede cuando empezamos a mirar aplicaciones de CRM, HCM, etc.
Entonces, porque nos hacen las preguntas:
“¿Cuándo vamos nosotros a Cloud?”
“¿Estamos listos para ir a Cloud?”
Si bien los proveedores de Cloud tienen muchas soluciones maduras, el offering es tan amplio que no es fácil tener un mensaje claro. Nos encontramos incluso con consultores que no tienen conocimiento de que significa la palabra «Cloud». Muchos piensan que si uno «sube» a «Cloud», sus datos no están en ningún lugar «físico».
Cloud ya está aquí e incluso es muy probable que usted lo esté utilizando
La pregunta no debe ser general, sino puntual, y analizada dentro de cada empresa. Por este motivo es muy importante contar con un buen asesoramiento. Cuando nos preguntan: “¿Estamos listos para ir a Cloud?», la respuesta es ¡Sí!
Para ello, se debe observar a la empresa en su conjunto, armando lo que muchas de ellas (especialmente las empresas más pequeñas) no tienen: un mapa de sistemas.
Entender que su mapa de sistemas no es solo si cuentan con un ERP, sistemas de facturación, CRM y otras aplicaciones empresariales. También se deben analizar aplicaciones que ya damos como «obvias», como e-mail, repositorio de documentos, etc.
Hoy Cloud cuenta con diversas y amplias funcionalidades, de las cuales tenemos que saber elegir: IAAS, PAAS, SAAS, DAAS… y cada una con sus respectivas variantes, no sólo entre los distintos proveedores, sino dentro de un mismo proveedor.
Subir a Cloud no implica siempre reemplazar el sistema que utiliza la empresa. Con una gran cantidad de sistemas es posible realizar lo que en el mundo Cloud se denomina «lift and shift». Esto es, ingresar al mundo Cloud aprovechando uno de sus componentes. En este caso solo la infraestructura (IAAS). Nuevamente esto no es una conversación nueva, lo que estamos hablando es básicamente de mover un sistema fuera del ámbito de la empresa a un datacenter (o Cloud en este caso). Por si sola, esta movida no es diferente a lo que algunas empresas ya realizaron sin pensar en Cloud: tercerizar su sala de servidores en un datacenter externo. Para que tenga sentido debe incluirse en un plan a mediano y/o largo plazo, utilizándolo como el inicio de un “Move to Cloud”. Abrir la cabeza a otras funcionalidades que no teníamos en nuestro mapa, y que el Cloud nos habilita sin grandes inversiones y en corto plazo.
Otras veces la respuesta no viene por el hecho de reemplazar un sistema existente, sino por el incorporar un nuevo software. En este caso Cloud muchas veces ofrece una ventaja muy importante, sobre todo para empresas pequeñas. La inversión inicial que implica un nuevo software en Cloud es habitualmente muy inferior a las tecnologías on-premise, como también lo son los tiempos de adopción.
Hoy en día es muy habitual ver startups con sus sistemas en Cloud, sabiendo que se implementa rápidamente y no requiere un upfront importante (compra de hardware, licencias de software, consultoría de implantación).
Entonces podemos afirmar que Cloud no es el futuro, Cloud YA está aquí, es el presente. El desafío es como nos valemos de Cloud para innovar, tener una rápida respuesta a los requerimientos de nuestras empresas, saber utilizarlo para la reducción de costos, acelerar los tiempos de adopción y para transformar nuestras empresas aprovechando cada vez más el mundo digital que hoy nos rodea.
Por Fabio Schygiel,
Chief Technology Officer, QBIT